viernes, 3 de julio de 2009

Veranos perdidos

Hoy...

Joan Laporta

La verdad es que no sé por dónde empezar.
Si al forofismo de Gaspart le sumamos el victimismo de Nuñez, le añadimos la personalidad de Calderón, el punto ridículo de Mendoza y lo impregnamos todo del mesianismo de Lopera, lo que nos sale es Joan Laporta.

Creo recordar que Laporta se presentó a las elecciones del Barcelona como cabeza de un equipo joven cuando el Barça venía de la época de Gaspart.
No tardó en defenestrar su equipo y quedar él mismo como líder todopoderoso.

Fue entonces cuando las cosas empezaron a ir mal y el pasado verano estuvo a un centímetro de tener que irse por una moción de censura.

Entonces sucedió el milagro.

Fue algo así como cuando en el Tetris tienes todas las figuras ya arriba del todo, completamente descolocadas y vas a perder irremediablemente y, de pronto, te sale una barra roja y por casualidad le das la vuelta, te encaja, haces la línea que te quedaba y pasas pantalla.

Esa barrita roja se llama Guardiola.

El Barcelona lo ganó todo y Laporta sólo tenía que sacar pecho.

Pero un día Florentino Pérez decide volver.

Laporta, que tiene el equipo hecho, con el mejor fútbol que se ha visto, en vez de sentarse a ver como el Madrid gasta cientos de millones en intentar hacer un equipo, empieza a cagarse por la pata y a hablar cuando el que está en la posición privilegiada es el Barcelona.

En fin...