domingo, 24 de mayo de 2009

Concierto de Lapido y otros como yo

No soy crítico musical. No sabría hacer la crónica de un concierto, ni la crítica de un disco ni de una canción ni el estudio de una carrera musical.
Dicho esto me atrevo a decir que el concierto de ayer de Lapido en la Sala el Sol, todos sus discos, todas sus canciones y toda su carrera son extraordinarias.
Jose Ignacio Lapido es el músico español desconocido más reconocido. (Esta frase es muy promo ¿eh? se me ocurrió ayer).
Lapido era el compositor y guitarrista de mi grupo favorito. Se llamaban 091 y se deshicieron hace más de diez años. Desde entonces ha iniciado una carrera con su propio nombre y saca un disco cada dos años más o menos.
Sobre el concierto de ayer no voy a hablar de sonido, ni del bajista, ni del repertorio.
En el escenario no hubo poses, ni láser, ni humo, ni fuegos artificiales. Sólo canciones. Nada más.
El público de Lapido lo adora. A un concierto de Lapido se va como a un encuentro con el Papa. Ayer en la Sala El Sol la media de edad rondaba los treinta y cinco años. Prácticamente ningún veinteañero. Gente normal. No había crestas, ni tupés, ni tachuelas, ni músicos de grupos famosos. Pero era un público con clase.

Media entrada.

El otro día Beyonce vino a Madrid y llenó. El año pasado Miguel Bosé tuvo un éxito enorme de ventas con su disco Papito.
¿Por qué si estos cantantes -cuyas canciones me parecen mucho más lejanas a nosotros- tienen tanto éxito, Lapido no?

No soy experto en música y sé que cada uno tenemos nuestros gustos e incluso entiendo que puede ser más atractivo escuchar las canciones mucho más inmediatas de Paulina Rubio, que los temas oscuros de Lapido. Sé que escuchar sus discos requiere un pequeños esfuerzo. Pero aún así, Lapido tendría que tener muchas más ventas de discos y de entradas.

Recomiendo, aconsejo, ruego a las cuatro personas que algún día lean esto que hagan ese esfuerzo y empiecen a escuchar a Lapido. No son canciones de primera escucha. De hecho, no creo que sea exactamente canciones lo que él hace. Se parecen más a mapas para caminar por la vida, llenos de dudas, de incoherencias, de escepticismo y de calles con aceras que sueñan con llegar al mar.

Es música para otros como yo.

Dejo un vídeo de una canción preciosa de Cartografía, su último disco hasta hoy.

Cuando el ángel decida volver.