viernes, 26 de agosto de 2005

La sonrisa de la Gioconda


¿Soy el único que no le ve nada especial a la sonrisa de Mona Lisa?

Los toros y los gilipollas II

Hablando de toros y de gilipollas -dos términos inseparables-. Hoy he visto en el telediario de Antena 3 que, en no sé qué ciudad de Madrid, se están haciendo encierros que transmite la propia Antena 3 a las 8 de la mañana.
Resulta que en algunos sitios en los que no había tradiciones paletas, se crean.

En fin, a lo que voy. La movida es surrealista a poco que lo meditemos un poco: montan un tingladillo a imagen y semejanza a los San Fermines. ¿Para qué? Pues supongo que para que la gente se lo pase bien. ¿No se montan boleras americanas y hamburgueserías? Pues vale, venga, esto que es más español.

De entrada yo no entiendo que pasárselo bien es meterte en un apuro para ver si puedes salir de él. ¿Para eso no están los videojuegos?

Es una actividad lúdica extraña. ¿En cuantos lugares de recreo para el público general se monta un hospital de campaña y se contrata a todo un equipo sanitario?
Ayer contaban que hubo que operar en la plaza a un herido por asta de toro.

[Porque hay que diferenciar a los "heridos por asta de toro" del resto. Los primeros tienen más ... rollo, molan:

- Tío, ¿ves estos 50 puntos?

- Sí.
- Herido por asta de toro en los encierros de Valmorrana.
- (¡Qué hombre! ¡Qué macho! ¡Qué gallardía!)
- Y tú, ¿ese vendaje?
- Lo mío fue en una montonera.
- Ah. (Pringao).]

Y digo yo, si no vas a cobrar por exponerte ¿pa qué lo haces?
Y digo yo, si de lo que se trata es de que no te pille el toro, gilipollas ¿pa qué te metes?
Yo mañana a las 8 de la mañana voy a estar durmiendo ¿por qué no haces tú lo mismo?
Hazme caso. Vas a triunfar. Ni un percance.


(2ª parte - Los toros, los gilipollas, el Estado).

No lo entiendo.
El Estado vela por nosotros. Sube los impuestos de los productos nocivos (alcohol, tabaco). Y limita sus lugares y momentos de consumo.
Nos obliga a llevar el cinturon de seguridad, aunque el hecho de no llevarlo no perjudique a nadie más que al que no lo lleve.

Vale. Lo admito. Es por los costes sociales y sanitarios que conllevan.
El Estado es intervencionista y considera preferente recortar libertades a asumir esos costes.

Pero coño, entonces ¿lo de los encierros?
¿Quién paga esas ambulancias?, ¿y los médicos, enfermeros, camillas, material, horas extras, desplazamientos?
¿Quién paga las bajas de los corneados y heridos?, ¿y la rehabilitación?, ¿y la asistencia médica?

Ya no digo que prohíba los encierros tradicionales, pero que no fomente otros nuevos.
¿Tan poca imaginación tienen para ofrecer actividades a la gente?
Mira, cursos de tuning.