jueves, 11 de agosto de 2005

Norma de Ocho

El hombre más feliz es aquel que mejor sabe manejar su insatisfacción.

El paseo de la vida

No me creo esa historia del amor único y verdadero. No creo que nadie me complete ni que yo complete a nadie.

Aun así, siempre que veo una orquesta tocando en cualquier día grande o pequeño de una fiesta local, es difícil no encontrarme a una de esas parejas mayores bailando.

Desde luego no son los mejores bailarines, ni los más elegantes, ni tampoco lo más ágiles. A veces incluso ni siquiera su baile es el que se correspondería con la música que suena. Pero cuando me fijo en los pies de los dos bailarines veo que van perfectamente acompasados. Conocen perfectamente el siguiente movimiento de su pareja y lo realizan exactamente a la vez.

Quizás no sepan más que ese baile. Pero es el baile de su vida.

En Murieron con las botas puestas, el General Custer (Errol Flynn) le dice a su esposa (Olivia de Havilland) antes de morir: "Señora, ha sido un placer pasear con usted por la vida".


Quizás para esos bailarines, y para los que piensan como ellos, ese sea el sentido de ese sueño de un perro loco que es la vida.